Ignoro si a alguien puede interesar enterarse de lo que es tocar ante 10 mil personas a la una de la tarde bajo el sol a una temperatura arriba de los 24 grados con diarrea, así que omitiré los anécdotas. Andar de gira en estas condiciones es poco narrativo. Llegamos anoche a las dos de la mañana, después de un viaje con dolor de panza. Hicimos prueba de sonido a las 5 de la mañana y a las 12 del medio día había que estar listo en el Lobby. Ni siquiera le llame a mis amigas de aquí, pues no hice más que dormir y levantarme como zombi al baño cada determinado tiempo.
Pensé que no aguantaría todo el concierto. Por fortuna una chica alta, espigada y con tatuajes en las lumbares, de ropa ligerísima y un vientre impresionante, estuvo bailando frente a mí todo el toquín, así que esta visión me ayudó a no pensar demasiado en mi panza. Lástima, me siento tan mal que ahora mismo me regresaré con todo el grupo al DF, aunque habría ameritado quedarse a conocer mejor a esta chica extranjera. Con lo mal que me siento debo conformarme con haber obtenido su teléfono y haberle dado el mío, mientras ella me decía que pronto iría a visitarme. Igual y nunca lo hace. Son las 5:45 de la tarde y en 20 minutos salimos en el autobús, por fortuna podré tirarme en una cama todo el trayecto.
Here's to hoping your bowels even out. bueno fortuna.
Posted by: Tony DuShane on February 5, 2003 06:03 PM